miércoles, 27 de agosto de 2008

La ira se haya en muchos animales, la sabiduría en el hombre


La respiración se acelera. Cerramos los puños con fuerza. La mandíbula se tensa. Los ojos se salen de las órbitas. Tiras, golpeas o rompes cualquier cosa que esté a tu alcance. Todo un conjunto de manifestaciones que denotan nuestra ira.
La ira es tratada por la Iglesia católica como el deseo de venganza. La etnia gitana, tradicionalmente, es experta en esto. El tomarse la justicia por su mano viene derivado de la rabia que sienten hacia la persona que les ha hecho mal. No pueden esperar a que la justicia actúe. La justicia de los gitanos no tiene lista de espera.
La mayoría de la gente hemos sentido rabia alguna vez en la vida, pero es un sentimiento que tendemos a controlar. No queremos perder los papeles. Por lo tanto, sentimos ira pero sin llevarla a un nivel destructivo. Pero la gente sorprende. Cómo estamos todo el día controlando nuestras emociones coléricas, llega un día que las personas que tienen un umbral de ira muy alto no pueden controlarse más, la última gota colma el vaso y adiós al vecino del 1º B o a su esposa, o al camarero del bar de la esquina,... entonces todo el mundo se pregunta: "¿cómo ha podido ser, si era una persona tan tranquila?" Con alguien de mal carácter todos hubieran estado prevenidos.
Por esta razón, es mejor manifestar las emociones que guardárselas en una mochila de mal humor. Si algo te ha sentado mal, no te lo calles. Es mejor que una explosión que arrase con todo lo que esté a su alrededor. Esto me recuerda al capítulo de Los Simpsons en el que Flanders estalla de cólera por que sus vecinos le construyen, con toda su buena intención, una casa deshabitable. Toda la rabia contenida durante su vida, reflejada en pequeños diminutivos absurdos, estalló en un sólo segundo. Las cosas se pueden solucionar con una pequeña discusión. Es un consejo de la Dirección General de Convivencia.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola me ha encantado la entrada,y estoy totalmente de acuerdo contigo,ya que siempre es mejor expresar tus sentimientos antes de explotar,pero tambien reconozco que hay veces en las que es imposible hacerlo ya que puedes dañar a gente a la que quieres y te importa.

Sigue escribienso asi de bien, espero con impaciencia la siguiente entrada.

Joaquin

Juan Duque Oliva dijo...

Muy bien dicho hay que abrirse para todo tipo de energías, no podemos tragarnos todo.

Imagínate que te estás aguantando los pedos toda tu vida.... eso no puede ser.

Saludos y pedona que haya sido un poco escatológico

Anónimo dijo...

La rabia es incontrolable... que m lo digan a mi el 11 de agosto que aunque nunca deje de pensar que te habia defraudado tampoco entendi tu capacidad para dormirte con esa tranquilidad a mi lado... Pienso lo mismo que tu moreno... lo descubro sorprendida así en tu blog. Y el texto sin querer no lo lei con la maketa... las cosas del diseño que a veces prevalecen a lo más interesante que es la palabra... y más la tuya que en nuestra convivencia queda en ocasiones dormida...

Tu angel

Me_llaman_coko dijo...

Joaquín, ya era hora de que te atrevieses a comentar. Como te dije, un honor.
Luzz, anda, andaaa, weno eso tampoco se puede quedar dentro, aunque no sea mucho de expulsarlo.
Ángel mio, a veces es mejor controlar la rabia, aunque la expulses pero con más calma. Nunca seré capaz de agradecerte todo lo que haces por mí.

Un besazo

Anónimo dijo...

Hola, muy interesante el articulo, felicitaciones desde Chile!